Discurso: Palabras de un joven combatiente que sólo desea poder mejorar esta situación actual.

Razones siempre habrá de más como la necesidad de luchar. ¿A quién le gusta vivir marginado y excluído? ¿A quién le gusta ver situaciones de pobreza, hambre, miseria e injusticias? No sé si a ti te gusta pero a mi no. Yo no te hablaré de mi ideología, ni siquiera lo mencionaré. Porque en este discurso no cabe hablar de ideologías ni diferencias entre pensamientos, más bien de nuestras condiciones de ser humano y las necesidades que tenemos en este país. Ya sabemos que el país está jodido, ya sabemos que el presidente no ve para abajo y que sólo ve por sus intereses. Pero como ser humano tenemos deberes, y entre ellos está el deber de luchar, de rebelarnos. De no aceptar lo que nos ofrecen así, porque nos hace ser conformista. Desde que nacemos tenemos el síntoma más bello del mundo, el de la rebeldía. Nacimos gritando, nacimos con una voz hermosa, nacimos con el poder de  gritar dando a entender nuestro sentir. No es posible que el pueblo este dormitando, porque estan entre dormir y despertar. Debemos de tomar la responsabilidad historica que nos toca vivir, ser sumisos no es vivir. Obedecer no es la solución, no hay que esperar a que el pueblo y el país este sumido en la podredumbre para poder actuar. Sabemos que la situación actual está mal y que muchos países se están levantando. Esto va para aquellos compañeros, aquellas personas, valientes y tenaces que nos hacen ver que la lucha nos hace vivir, porque la persona que lucha ¡nunca morirá! Y va para las personas que están dormitando, ¡animense a luchar! ¡animense a hacer algo! ¡Animense a mejorar está situación que nos tiene jodidos a todos! Como juventud nos toca seguir ¿cuantas personas no lucharon por nuestra libertad? ¿cuantas personas no están bajo nuestros pies que murieron por nuestro futuro? Y tu sentado frente al televisor se lo agradeces. Viendo telenovelas de quinta, con historias que adormecen sus sueños e ilusiones. Esas personas luchadoras, compañero mexicano, están avergonzadas de ver que su lucha no sirvió, que está volviendo la domesticación. Que el poder y lo corrupto absorben nuestra libertad. Ya no podemos ir libres por las calles, yo sólo te pido que escuches con atención. Que te animes a luchar por el futuro de tus propios hijos que mañana te lo agradecerán. ¿Y que remedio para tal injusticia y situación? La única solución sin duda es una verdadera Revolución.