De paso ligero pero firme
Camina siempre la pequeña.
Ella se llama Anarkrata
Y no busca admiración
Su ideal la mueve
Y sin querer mueve al mundo
Retumba el suelo con cada pisada que da
Hace palpitar corazones libertarios
Hace ondear banderas rojinegras.
La pequeña Anarkrata
Hace escuchar su voz
Su voz se oye en cada rincón
No importa que no haya nadie
Ella se siente feliz por decirlas sin interrupción.
Lleva un marcador negro
Una mochila y miles de hojas bajadas
Del árbol de la inspiración
En cada muro hay algo de ello
En cada muro su letra se marca
Y queda sellada con su ideal.
Anarkrata pelea por lo que quiere
Sola siempre va
Su andar garboso la distingue
La distingue su forma de luchar
Su lucha está en un cóctel molotov
En el encierra llamas y palabras
Contra el opresor.
Anarkrata quiere incendiar el mundo
La pequeña quiere construir un mundo nuevo.
No quiere ayuda, quiere compañeros
Que se unan al movimiento.
Ya ha encontrado varios
Varios quieren estar con ella
Tomados de la mano
Enumerando las maneras de destruir
A todo fascista represor.
Anarkrata tiene una sonrisa a todo
Todo el día tiene una sonrisa en el rostro
Hace lo que le gusta
Le gusta llevar sus palabras a otros.
Sale a la calle, se pone capucha
No quiere reconocimiento
Quiere que todo se vuelva mejor
Autogestión, hazlo tu mismo
Son los lemas que ella lleva
Inscrito en los brazos.
Anarkrata dice que su lucha
Es a intención de sus hijos
Esos hijos que algún día crecerán en su vientre.
Ella prefiere hacerlo ahora
Y no mañana ni pasado
Ella dice que la utopía de hoy
Será la realidad de mañana.
Anarkrata siempre está de pie
Luchando día a día
Anarkrata prefiere morir de pie
Y no servir y vivir de rodillas.
Lleva un altavoz
Siempre grita: ¡Insumisión!
Búscala por ahí
Ella es Anarkrata
Anarkrata es su nombre
Se apellida Revolución
La apodan Rebeldía
Yo la llamo Amor...